He mirado al cielo, porque amo el cielo,
He mirado a "alguien pasar", amo a ese alguien,
la idea que me inspira, la forma en que yo lo elevo,
Creo que vale la pena disfrutar...
Hay momentos en que no me cabe el resto del mundo,
simplemente me abandono... me abandono... me abandono...
Y, es curioso... puedo entenderme, puedo sentirme, puedo quererme...
No sabía que queriéndome un poquito, todo lo que eres se refleja, sin presiones...
Cada día, cada minuto, soy consciente de que mi presente es... ahora,
ya fue mucho de divagar, aunque me complazca tanto abandonarme a la mar,
cada día, cada minuto... doy un paso más cerca...
de mí, de ti... en mi camino, parte del mundo.
Me necesito, decía yo que "por tanto que curar"
me necesito, porque cuando te necesité algo estaba mal,
Me abandono, lo siento, simplemente me abandono,
Soy adicto de esto que hay en mis venas... mis venas... nuestras venas.
He mirado el cielo, Diciembre esta por terminar,
Tanto por hacer, tanto por crear,
Me abandono, me necesito...
Es la única forma ahora para que un futuro a los nuestros les pueda dar.
Algo dormido se rompe, se corrompe,
sólo así encontré este sabor,
este color, dorado, en el medio de un blanco que urge iluminar,
de tantos colores como sueños por crear...
Corrómpete hasta el punto en que no pares de soñar,
Hasta el punto en que comprendas, en que se provoque un cambio total,
Si hay que morir para vivir, si hay que transmutar para seguir,
Encuéntrate contigo, en el filo de la luz y la oscuridad.
Hay tanto de ti por descubrir,
Tanto de nosotros para compartir,
Y en un mundo donde creemos saber, aún es necesario seguir buscando...
Nada es acabado, nada es definitivo, nada es tan sagrado como lo que entiendes y sientes por tí mismo.
Hay algo adelante,
Hay algo... que no sé que es (mas lo busco)
Hay algo por lo cuál sigo caminando,
Cambié mi camino y, que tal!¡!, que seguía siendo el mío.
No te extraño,
Porque vas conmigo,
Soy todo eso que siempre fui, (Y todo lo que soy ahora y falte por descubrir)
Y tú, sí... tú, eres todo lo que yo quiero. (Tu ayer, tu ahora, tu mañana)
El otoño concluyo y un olor muy raro inunda el aire,
Si necesitamos otro mundo para hallarnos, para no perder el alma,
Deja que las hojas te lo indiquen, sigue la nieve, las flores o la Luna,
Estoy seguro de que siempre, alguna estrella, te dirá donde encontrar tus sueños.
He mirado al cielo, porque amo el cielo,
En él, Tres Estrellas de estación me hacen recordar quien soy y quien he sido,
Me hacen preguntarme, quedarme en silencio, no buscar respuestas, sentir mi latir por dentro,
Abrir mis ojos y flotar... dejando al mundo rodar.
Tú te necesitas, Yo me necesito,
Así si me necesitas, sabrás que es porque yo te necesito,
Un sabor, un latido, consciente y tranquilo,
Si madurar es empezarnos a podrir... Quiero saber bien.
Corrómpete hasta el punto en que no pares de soñar,
Todos encontramos el momento exacto para abandonarnos, para regresar,
Basta saber, realmente saber quien es el yo que llevas dentro,
Tú mismo eres tu barrera, tu límite, tu mundo.
Gana, pierde,
Hazlo todo... pero aprende,
Gana, pierde,
Hazlo todo... sólo se consciente.
Sin ayer no hay un mañana,
pero ninguno es, sólo es ahora, siempre ahora,
Intentar, todos los días, de no perder tiempo, no perder el rumbo,
Y sonreir siempre en el fondo, ya que camino a mi destino.
Nunca es fácil, nada en este mundo es fácil,
Y a veces me pregunto: ¿Realmente valdrá la pena?
Y, de repente, miro al cielo, miro alrededor, me enamoro perdidamente de todo,
Y me abandono... me abandono... me abandono...
Si somos capaces de sentir tantas cosas,
Creo que debemos hacer que el mundo importe y de repente, deje de importar,
Nadie verá mal si caminas tu camino, disfrutas tu vida y transformas al realidad,
Hasta el dìa de hoy, a nadie le está prohibido soñar.
Si pareciera que hablo sin sentido,
Si diera la impresión de que existe mucho más,
Estás en lo correcto, quizá no sé que digo,
Quizá sólo siento... ¿que ya no lo hace nadie más?
Dulces notas acompañan mi latido,
Yazco derrotado ante la corrupción de mis sentidos,
Dulce sonido, de mi sueño dormido,
Que me hace divagar...
Me abandono, me abandono, me abandono...
...Al instante que dura la felicidad.
la idea que me inspira, la forma en que yo lo elevo,
Creo que vale la pena disfrutar...
Hay momentos en que no me cabe el resto del mundo,
simplemente me abandono... me abandono... me abandono...
Y, es curioso... puedo entenderme, puedo sentirme, puedo quererme...
No sabía que queriéndome un poquito, todo lo que eres se refleja, sin presiones...
Cada día, cada minuto, soy consciente de que mi presente es... ahora,
ya fue mucho de divagar, aunque me complazca tanto abandonarme a la mar,
cada día, cada minuto... doy un paso más cerca...
de mí, de ti... en mi camino, parte del mundo.
Me necesito, decía yo que "por tanto que curar"
me necesito, porque cuando te necesité algo estaba mal,
Me abandono, lo siento, simplemente me abandono,
Soy adicto de esto que hay en mis venas... mis venas... nuestras venas.
He mirado el cielo, Diciembre esta por terminar,
Tanto por hacer, tanto por crear,
Me abandono, me necesito...
Es la única forma ahora para que un futuro a los nuestros les pueda dar.
Algo dormido se rompe, se corrompe,
sólo así encontré este sabor,
este color, dorado, en el medio de un blanco que urge iluminar,
de tantos colores como sueños por crear...
Corrómpete hasta el punto en que no pares de soñar,
Hasta el punto en que comprendas, en que se provoque un cambio total,
Si hay que morir para vivir, si hay que transmutar para seguir,
Encuéntrate contigo, en el filo de la luz y la oscuridad.
Hay tanto de ti por descubrir,
Tanto de nosotros para compartir,
Y en un mundo donde creemos saber, aún es necesario seguir buscando...
Nada es acabado, nada es definitivo, nada es tan sagrado como lo que entiendes y sientes por tí mismo.
Hay algo adelante,
Hay algo... que no sé que es (mas lo busco)
Hay algo por lo cuál sigo caminando,
Cambié mi camino y, que tal!¡!, que seguía siendo el mío.
No te extraño,
Porque vas conmigo,
Soy todo eso que siempre fui, (Y todo lo que soy ahora y falte por descubrir)
Y tú, sí... tú, eres todo lo que yo quiero. (Tu ayer, tu ahora, tu mañana)
El otoño concluyo y un olor muy raro inunda el aire,
Si necesitamos otro mundo para hallarnos, para no perder el alma,
Deja que las hojas te lo indiquen, sigue la nieve, las flores o la Luna,
Estoy seguro de que siempre, alguna estrella, te dirá donde encontrar tus sueños.
He mirado al cielo, porque amo el cielo,
En él, Tres Estrellas de estación me hacen recordar quien soy y quien he sido,
Me hacen preguntarme, quedarme en silencio, no buscar respuestas, sentir mi latir por dentro,
Abrir mis ojos y flotar... dejando al mundo rodar.
Tú te necesitas, Yo me necesito,
Así si me necesitas, sabrás que es porque yo te necesito,
Un sabor, un latido, consciente y tranquilo,
Si madurar es empezarnos a podrir... Quiero saber bien.
Corrómpete hasta el punto en que no pares de soñar,
Todos encontramos el momento exacto para abandonarnos, para regresar,
Basta saber, realmente saber quien es el yo que llevas dentro,
Tú mismo eres tu barrera, tu límite, tu mundo.
Gana, pierde,
Hazlo todo... pero aprende,
Gana, pierde,
Hazlo todo... sólo se consciente.
Sin ayer no hay un mañana,
pero ninguno es, sólo es ahora, siempre ahora,
Intentar, todos los días, de no perder tiempo, no perder el rumbo,
Y sonreir siempre en el fondo, ya que camino a mi destino.
Nunca es fácil, nada en este mundo es fácil,
Y a veces me pregunto: ¿Realmente valdrá la pena?
Y, de repente, miro al cielo, miro alrededor, me enamoro perdidamente de todo,
Y me abandono... me abandono... me abandono...
Si somos capaces de sentir tantas cosas,
Creo que debemos hacer que el mundo importe y de repente, deje de importar,
Nadie verá mal si caminas tu camino, disfrutas tu vida y transformas al realidad,
Hasta el dìa de hoy, a nadie le está prohibido soñar.
Si pareciera que hablo sin sentido,
Si diera la impresión de que existe mucho más,
Estás en lo correcto, quizá no sé que digo,
Quizá sólo siento... ¿que ya no lo hace nadie más?
Dulces notas acompañan mi latido,
Yazco derrotado ante la corrupción de mis sentidos,
Dulce sonido, de mi sueño dormido,
Que me hace divagar...
Me abandono, me abandono, me abandono...
...Al instante que dura la felicidad.
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