Alguna vez has meditado acerca de las manías de tu carácter? Ya sabes… algo raro que uno hace y que nunca falta el juzgón que se da cuenta… He aquí 5 de mis manías actuales más cotidianas:
* En el trabajo: No puedo estar sin una pluma, si no está en mi mano está en mi bolsa del pantalón o en el escritorio pero si por alguna razón -llamada generalmente robo)-no tengo pluma me pongo loquito, simplemente loquito… no debería ser y digo, no es tan grave… pero encontrar otra pluma es pedir demasiado -y uno las usa, perdóname-… y como soy marro y no pienso gastar en plumas pues me pongo loco hasta que obtengo otra.
* La correcta escritura. No soy graduado de lectura y redacción y siempre hay alguna omisión o detalle a depurar ortográficamente en un texto, si escribo y tengo el tiempo verifico bien las palabras del texto a fin de evitar las faltas… es una verdadera manía, si escribí algo mal de camino me regreso y lo corrijo y detesto sobremanera que el odioso Word me señale palabras… no lo soporto!!! A veces, cuando la concentración es tal que no me detengo a observar nada hago estas correcciones a la lectura del texto terminado y es entonces cuando, si me encuentro que una palabra esta mal escrita, simplemente me detengo, voy a cambiarla y -si es posible- empiezo toda la lectura otra vez, a veces sólo tomo nota y la cambio al final… es una manía pero una que me gusta.
* El cigarro de después de la comida… maldito ritual, seña de un vicio que, ahora si, ya es de preocuparme… una cosa es segura: puedo no fumar en otros momentos, pero después de comer es sagrado…
* Loop. Cuando una canción nueva me fascina, poooobre canción. Su primer paseo por mi vida conduce a muchos sitios mentales y, como yo no escatimo, requiero que la rola se repita y que suene y suene y suene y suene y suene… quizá quien más debe detestarlo es mi madre, pobrecilla… pero sí, es una manía… devoro canciones, me hago uno con ellas.
* Con las manos vacías. Hay una manía que asumo a medio mundo le da: no me gusta cargar cosas… con el tiempo aprendes a hacerlo y a soportarlo pero de ahí viene mi manía. Puedo cargar como burro siempre y cuando no ocupe las manos, las cosas que cargo con las manos simple y sencillamente me desesperan (como un suéter)… eso y el exceso de cosas en una bolsa de mi pantalón… es por eso que amo las mochilas aunque casi siempre todo lo que meto a la mochila nunca sale de ella (como las manzanas, damn!)
* La correcta escritura. No soy graduado de lectura y redacción y siempre hay alguna omisión o detalle a depurar ortográficamente en un texto, si escribo y tengo el tiempo verifico bien las palabras del texto a fin de evitar las faltas… es una verdadera manía, si escribí algo mal de camino me regreso y lo corrijo y detesto sobremanera que el odioso Word me señale palabras… no lo soporto!!! A veces, cuando la concentración es tal que no me detengo a observar nada hago estas correcciones a la lectura del texto terminado y es entonces cuando, si me encuentro que una palabra esta mal escrita, simplemente me detengo, voy a cambiarla y -si es posible- empiezo toda la lectura otra vez, a veces sólo tomo nota y la cambio al final… es una manía pero una que me gusta.
* El cigarro de después de la comida… maldito ritual, seña de un vicio que, ahora si, ya es de preocuparme… una cosa es segura: puedo no fumar en otros momentos, pero después de comer es sagrado…
* Loop. Cuando una canción nueva me fascina, poooobre canción. Su primer paseo por mi vida conduce a muchos sitios mentales y, como yo no escatimo, requiero que la rola se repita y que suene y suene y suene y suene y suene… quizá quien más debe detestarlo es mi madre, pobrecilla… pero sí, es una manía… devoro canciones, me hago uno con ellas.
* Con las manos vacías. Hay una manía que asumo a medio mundo le da: no me gusta cargar cosas… con el tiempo aprendes a hacerlo y a soportarlo pero de ahí viene mi manía. Puedo cargar como burro siempre y cuando no ocupe las manos, las cosas que cargo con las manos simple y sencillamente me desesperan (como un suéter)… eso y el exceso de cosas en una bolsa de mi pantalón… es por eso que amo las mochilas aunque casi siempre todo lo que meto a la mochila nunca sale de ella (como las manzanas, damn!)
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