Loop

Repetidamente,
tu voz suena en mí como un eco,
que me reitera una y otra vez,
un "yo te quiero".

Loop,
Todos los días necesito oirlo,
cuando miro por la ventana del auto,
cuando hablo con los demás como si no pasara nada.

Cada vez que mamá sonríe,
y todas las veces que llueve y se calma,
en el cine, en el trabajo, caminando en la mañana,
Loop! Repíte incesantemente tu llamada...

Una cerradura y su llave, se resumen en una palabra,
que se repite, incesantemente, durante todos los tiempos,
una y otra vez, desde el principio hasta el final,
eres tú... ¿Quién eres tú? Quien le pone este loop a mi alma.

Sin ambición ni esperanza,
sólo la calma,
no necesito darme razones,
no necesito saber todas las respuestas.

Hay veces en que sola, tu alma,
logra que te percates de que todo esta en su sitio,
de que las aves sobreviven a las tormentas,
igual que las hormigas y los grillos.

No es necesario saber todo,
no todo son preguntas y respuestas,
no hay necesidad de se abra y se cierre un corazón,
que siempre ha permanecido abierto.

Una simple repetición,
logra saciar el interior de mis venas,
y la sangre fluye con tal presión,
que necesito gritarle al mundo lo que siento.

No necesito razones,
ni certezas, ni consciencia de vida o de muerte,
todo lo es hoy, ahora, con una simple repetición en mente,
la conciencia de que el camino me conduce exactamente hacia donde me he propuesto ir.

Repetidamente,
tu voz... esa voz... suena en mí como un eco,
que me reitera una y otra vez,
un "yo te quiero".

¿De quién es esa voz?
Es mía... pero no lo es,
no necesito saberlo,
sé perfectamente lo que ello significa.

Duermo tranquilo,
finalmente, son días descansados,
y sueño contigo,
y esas alas que me eleven.

Tu voz, en loop,
Todos los días necesito oirlo,
cuando miro por la ventana de casa,
cuando miro a los ojos de mi mejor amigo.

En loop,
repitiéndose,
una y otra vez,
nunca me aburro.

Esas son de las cosas,
que nunca son suficientes,
que siempre bastan,
que vienen en la medida siempre correcta.

No hay amor como el que tú te das,
y que resuena en eco porque existe un "algo más"
la pertenencia de esa voz es de dos luces que se comunican,
donde estés y como estés... es mi voz la que estás escuchando.

Sin importar los ritmos,
las palabras llevan el mismo mensaje,
repetido, una y otra vez...
y no me canso de repetirlo ni de oirlo.

En loop,
se versan los "te quiero"
Repítelo,
nunca te canses de decirlo.

Loop!,
Todos los días necesito oirlo,
mientras voy caminando tranquilo y solo por mi vida,
es la conciencia de que te encontraré la esperanza de mi destino.

Loop!