Lira.

Hay una entrada,
la caminaré un día, de vuelta,
volveré a ser el niño, que juega en la fuente,
volveré a verlo todo... y entonces cruzaré el puente.

Ocho vueltas a la fuente que era mi circuito,
me quedaré en el puente de cuento de hadas,
correré por cada rincón, saludando cada árbol, cada rama,
volveré a verlo todo... y entonces cruzaré el puente.

En el teatro de marmól me reencontraré,
con todas las miradas, y ahí: tus ojos,
levantaré mi mano, haré la seña de un adiós,
volveré a verte... entonces cruzaré el puente.

Porque no hay lugar que sea más mío,
que el lugar donde dejé mi corazón guardado,
donde hice nacer los sentimientos que un día fueron tus besos y tus abrazos,
donde un día hice con mis manos las estrellas que te conté como mis sueños.

Tomaré a mi madre de una mano que siempre estará cerca,
lloraré, sin poder evitarlo,
porque es muy bello, ¿que no lo ves? es inmensamente bello,
un día regresar al sitio donde comenzó todo y donde todo regresará a ser energía.

Mi padre me llevaba de la mano, me infundió confianza,
para cruzar un puente, que colgaba de lazos irrompibles,
sus maderos, su paisaje, el gran arco... mi castillo, mi bastión,
fui heredado a salvaguardar el poder de un corazón.

Quiero caminarlo, una vez más, el día que parta,
quiero tener sólo 5 años, mi cara redonda, mis chinos y mis papas,
una resbaladilla, un sube y baja, el agua de la fuente, los marmoles, los azulejos,
los adoquines, las vueltas en circulo, los pasajes secretos, quiero ver el cambio de estación...

De invierno a primavera,
cuando una vez más sea uno con el mundo,
sólo mis recuerdos contarán que hube sido, que hube hecho...
Una vela dejar, una luz para no apagar... y entonces cruzaré el puente.

Veré a papa, veré a mamá, yo te volveré a ver,
abriré los brazos, sólo necesito un abrazo,
porque lo que siempre necesité fue sólo un abrazo...
y entonces cruzaré...


AstroJr. 2008.