15 enero 2008

Sunken Ghost Ship



Cuan breve el espacio y el tiempo nos ha quedado para vernos juntos.
Cada cual con sus responsabilidades.
Casi puedo jurar que aún se juran sabios y adultos.
Realmente poco tiene de incómodo ser y parecer un niño.

Eternamente congelados en el breve espacio de unos años,
que se empeñan en decirnos una y otra vez "a que no sabías lo que vendria"
Somos piezas de un momento que se empeña en repetirlo,
cuanto hemos cambiado, cuanto hemos dejado de ser lo que hemos sido.

Permanecemos aparentemente iguales,
Sin conocer nuestro dolor,
Nuestras penas,
Nuestro andar.

Permanecemos aparentemente iguales,
Pero somos fantasmas,
Navegantes,
De un barco que yace hundido.

Vagamos, recordando días que han sido,
Basta ya! Flooooten...
Dejen a su cuerpo respirar,
¿Acaso no hemos sido capaces de encontrar amigos?

Desde la costa es maravilloso contemplar la vista,
Hay varios que si preferimos la fogata,
Una y mil noches contemplando estrellas,
Hemos aprendido a dejarlas partir.

Cuan breve el espacio que separa nuestra mano de un teléfono,
De un "hola como estas! ¿cómo te ha ido?"
Cuan breve es la vida, que parece que fue ayer y han sido años,
Nos damos cuenta cuando vemos un espejo, en él nosotros, las marcas, las risas, los daños.

Me resisto a permanecer hundido,
La vida no acabo,
Yo no he llegado a donde iba,
Me resisto.

Voy para verlos, para saber de ustedes,
Voy a ese barco que yace hundido,
Para reclamar su compañía aquí a mi lado,
A la orilla de este ancho mar, brilla la noche.

Recordar desde la orilla,
Y dejar el barco hundido,
Con sus fantasmas y sus historias,
Son sólo días que ya se han ido.

¿Quién sos ahora?
¿Es cercano a lo que tú soñabas?
No hemos muerto, nunca hemos estado lejos...
¿Porqué el empeño en volver atrás?

Tengo mis manos y mis sueños que me llevan adelante,
Reposando, recostado, me dejo ser un niño solamente,
Miro al cielo, cuento estrellas, no necesitaba ser tan complicado,
Nunca pedí que ser amigo fuera necesariamente un pasado irrepetible.

Porque los momentos no cesaron ni la vida nos alejo,
Fuimos nosotros quienes partimos por una aventura,
Fuimos nosotros quienes decidimos sacarnos unos a otros de nuestra vida,
No por falta de amor ni de cariño... guys! A veces así es la vida.

Sólo quiero que estén conscientes,
De que siempre existe ante el mar una orilla,
Donde llegues caminando, te sientes y mirar el cielo,
Compartir, llorar, creeer, recordar entonces...

Ser humanos presentes, no vestigios del pasado,
No somos más estudiantes de una escuela que quedó perdida,
Ese Barco ya se fue, transporta a otros, nuestra nave yace hundida,
Guarda sus tesoros, guarda sus vivencias y es el mejor lugar donde puede estar.

El pasado no volverá,
Y aunque recordemos,
Es mejor la orilla,
A ser un alma en pena.

Es mejor la vida,
Es mejor en tiempo presente,
Es mejor reducir el breve espacio,
Entre mi mano y tu mano que me diga que me siente.

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